domingo, 31 de enero de 2010

Un día escribi una canción


Sin poder esperar más me recuesto a tu lado,
la noche detrás nuestro se apaga
ambos mirando las últimas estrellas caer del cielo,
nuestras manos juntas a la espera...
El silencio nos brinda su mejor música,
tu cuerpo mi mejor compañía,
tus labios son el deseo en sí mismos de proximidad,
Los dos tirados aferrados a ese instante,
las horas extensas acompañan nuestro sueño,
sueño que solo al final, solo vos y yo
sabremos si fue realidad,
según como lo imaginaste, según como lo pense,
tus palabras algún día diran,
qué tan cerca de lo real fue ese momento,
hasta cuando tus labios besaran los míos,
a modo de bienvevida, quizas,
a modo de cruel despedida,
no voy a dejar que pase, otra vez,
tanto tiempo sin revivir este instante que inspiro este soneto,
ese beso que desperto esta canción,
Ese efimero y preciso momento,
que vos y yo, estemos juntos...