viernes, 12 de febrero de 2010

Es lo que siento... pero falta, no se como explicarlo...


Apareces en cada momento que te necesito, estas ahí desde siempre. Sos especial desde aquel día que el destino nos cruzo, aunque tengo mis dudas, nosotros vivimos juntos otra vida, toda completa en otra vida, nos conocemos antes de nacer.
Es muy extraño como el tiempo nunca pasa para nosotros, te vi llorar, te abrace mil veces, te escuche, te hable en todos los momentos que me necesitaste al igual que vos conmigo.
La vida siempre no presenta retos, nos pone obstáculo y un obstáculo que tuve que atravesar fue estar algún tiempo alejado de vos, de tus cosas…
Ambos cambiamos, crecimos y nos dimos un tiempo de espera, ambos sabíamos y conocíamos el final. Una vez escupiste tu mano y pactamos ser hermanos de la vida y fallamos, hoy como hermanos que somos, nos dimos cuenta que no podemos tenernos lejos, que nos necesitamos y como te lo digo siempre esta vez, esa repetición del pacto, es para siempre, para toda la vida como en la otra vida, que no recuerdo bien como debe haber sido pero que si estuviste ahí no debe de haber sido para nada mala.
Son simples renglones de frases inconexas que solo buscan hacerte saber, todo eso que sabes qué me pasa con vos… porque te lo dije, porque me aseguro todos los días de decirte que te quiero, que es hermoso escucharte, aún a la distancia, siempre estás ahí.
Simples frases que me pediste por favor que te muestre, te dije que no podía expresar con palabras lo que pasa, porque mucho no entiendo, no entiendo cómo nos queremos tanto, y le encuentro la explicación menos lógica de todas, nos conocemos antes de nacer…
Después de tanto tiempo, volviste a mi vida, amiga de mi alma, con tus rayes, con tu persecuta, volviste y el día que volviste te espere con un regalo, ahora somos dos los interesados en saber de vos, en tus ratos libres, en tus besos, en tus abrazos… Me encanta que se te haya ido esa vergüenza por momentos de decir, no, no da, que vaya sola. Siempre respondo de la misma manera, si da, porque tenes más derecho que nadie a estar acá al lado mío y ahora de Bruno, tu sobrino para compartir una vez más y definitivamente nuestras vida, desde el momento en que volviste a mi casa, nos abrazamos y le jugamos la revancha al tiempo que habíamos dejado atrás, y ganamos, otra vez, porque entre hermanos de la vida, como somos, no hay nada que logre poner distancia, no más, porque crecimos, porque nos dimos cuenta, porque nos reímos de nuestro intento fallido y porque sabemos que desde ese momento en que todo volvió a estar en su lugar, a pesar de tu miedo, sabemos que ahora, ahora Mary es para siempre!!!
Te quiero mucho amiga!!!